Hoy,
26 de abril, se cumplen 108 años del nacimiento de un fotógrafo suizo
considerado uno de los más importantes fotoperiodistas del pasado siglo a pesar
de su temprana muerte por accidente en 1954 con tan sólo 38 años.
Miembro de la Agencia Magnum Photos, Werner Bischof captó con gran acierto y una técnica impecable los años
posteriores a la Segunda Guerra Mundial.
Bischof nació el 26 de abril de 1916 en Zurich.
Su infancia transcurrió en las ciudades de Zurich y Kilchberg en Suiza y en Waldshut,
localidad alemana fronteriza con Suiza.
Su padre era director de una fábrica de productos farmacéuticos y un entusiasta
fotógrafo aficionado.
En 1931 su madre fallece prematuramente.
Werner estudia en la Escuela de Artes Aplicadas de Zúrich (1932-1936), siendo
alumno de Hans Finsler, fotógrafo de la Nueva Objetividad, lo que le
llevó a un estilo meticuloso y perfeccionista.
En 1935 llegó a recorrer más de 400 kilómetros en bicicleta hasta Núremberg para
realizar la fotografía de una fuente.
En 1939 trabajó en la instalación de la Exposición Nacional Suiza y alquiló un taller en París con la intención de convertirse en pintor.
La Segunda Guerra Mundial le hizo regresar a su país y en 1942 entró como fotógrafo de moda en la revista Du, realizando diversas series fotográficas como una sobre la invalidez (en fotografía en color) o la serie Refugiados sobre los partisanos italianos internados en el Cantón del Tesino (Suiza).
En 1945 comienza un
viaje por Europa, junto a Emil Schulthess, retratando los desastres creados
por la contienda mundial, encargo realizado por Swiss Relief (una organización
dependiente de la Cruz Roja).
En 1946 viaja por Alemania, Italia y Grecia. En Milán conoce a su futura
esposa, Rosellina Mandel y publica su portfolio titulado 24 fotos.
Más tarde, en 1947, viaja a Hungría y Rumanía y al año siguiente termina la
documentación gráfica de la Europa de la posguerra viajando a Checoslovaquia,
Polonia, Finlandia y Noruega.
En 1948 realiza un reportaje para la revista Life sobre
los Juegos Olímpicos de invierno de Sankt-Moritz y al año siguiente se casa
en Suecia y se traslada a Inglaterra como colaborador de The Observer y PicturePost.
En este mismo año de 1949 ingresa en la Agencia Magnum Photos convirtiéndose en el sexto reportero internacional, aunque continúa con su
estilo perfeccionista, caracterizado por la composición de la luz y la
estructura formal de sus instantáneas.
Trabaja para Picture Post, Illustrated, Observer, Life, Epoca y Du.
En 1951 realizó un reportaje para la revista Life en la provincia india de Bihar, que publicó con el título Hambre en la India, obteniendo un gran éxito.
A continuación, viaja a Indochina (Vietnam, Laos, Camboya) durante tres meses como corresponsal de guerra de Paris Match.
Ya de regreso a Zurich, realiza una exposición y publicación llamada Menschen im Fernen Osten (Gente en el lejano oriente) donde presenta una selección de fotografías de Asia.
En 1953 planea un largo viaje por Sudamérica aunque primero
pasa varios meses en EE.UU. documentando nuevas carreteras.
Al año siguiente conduce de Nueva York a Ciudad de México con Rosellina y
después continúa solo el viaje.
Vuela a Panamá, Chile y Perú siempre trabajando
para la Agencia Magnum.
En los países sudamericanos refleja principalmente los ambientes de pobreza de
esos países y, en especial, los niños.
En Trujillo (Perú), el 16 de mayo de 1954, con 38 años, Werner muere al caer
por un barranco el vehículo en el que viajaba por los Andes peruanos.
Fuentes: Wikipedia, Agencia Magnum y Web de Werner Bischof.